jueves, 21 de enero de 2010

THE COACH




Últimamente se encontraba solo, triste. Pensaba que todo lo que hasta entonces había hecho, no había servido para casi nada. La losa del fracaso, aplastaba su estado de animo.

Sentado, al final del paseo que bordeaba la playa, de espaldas a la ciudad y mirando fijamente como una tras otra llegaban las olas a golpear las piedras que emergían de la arena; le martilleaba una y otra vez en la cabeza la pregunta de ¿para que habían servido todos esos años de trabajo?. ¿Para que tantos esfuerzos?¿Para que haber mantenido tanto espíritu de sacrificio y de superación?. ¿Para que? Si nada de todo esto le servia ni le interesaba lo mas mínimo a los suyos. Se sentía solo, perdido.

Por sus mejillas, desde los ojos, comenzaron a deslizarse un reguero de gotas que no se alcanzaba a distinguir, si eran lagrimas saladas o parte del agua que saltaba por los aires al estallar las olas contra la orilla y la brisa del mar había colocado caprichosamente en la desasosegada cara de Cesar.

Como si de una película se tratase, por la cabeza de Cesar comenzaron a pasar imágenes, recuerdos de sus comienzos. Siempre había tenido una facilidad natural para visualizar situaciones. Bien es verdad que siempre había visualizado su futuro, sus deseos y que en este momento, de forma espontánea, como si su mente le atacase a traición, empezó a visualizar el pasado. Aquellos primeros años cuando empezó a buscar trabajo para contribuir con la economía familiar, siendo todavía un adolescente, fue el punto de partida.

En un instante, ¡un flash! como dicen ahora los jóvenes, todo paso por su cabeza. Desde aquellos primeros años empezando desde abajo, pasando por todas la etapas intermedias hasta llegar a ese momento sentado al final del paseo de la playa. Mirando el mar. Un recorrido lleno de reconocimientos y éxito personal, profesional... pero ¿qué importaba todo aquello? ¿para que y de que servia tanta experiencia acumulada si no le servia a ninguno de los que el verdaderamente quería?.

Cesar, hacia ya bastante tiempo que desempeñaba el trabajo de entrenador. Había entrenado a equipos de elite. Equipos que llegaron a alcanzar el éxito partiendo de la nada o equipos que estando en situaciones criticas, consiguieron mejorar sustancialmente. Casi siempre tubo éxito y reconocimiento entrenando a otros, incluso consigo mismo el autoentrenamiento no le fue del todo mal. Su desolación llega cuando, en el cenit de su experiencia vital y observando que sus mas allegados podrían necesitar de un entrenador, no solo no es que no valoren su experiencia, es que los mira y se da cuenta de que viven confiados en que ellos no necesitan entrenar y por lo tanto no precisan los servicios de un entrenador.

Le desesperaba ver como se podía hablar de todos y de todo y no hablar nunca de cada uno de ellos, en primera persona. Risas, broncas, discusiones sobre temas banales o tangenciales y nunca sobre las cosas de uno mismo. Empezaba a rondarle la idea de que pese a estar claro el cariño y el buen royo que había entre ellos, a todos les daba reparo poner sobre la mesa sus verdaderos deseos e inquietudes. Compartir de verdad su verdad...

Se incorporo y continuo su paseo hasta alcanzar su coche y de camino para casa, continuo dándole vueltas al asunto, para finalmente comprometerse que para no perder la forma y caer en el abandono empezaría un nuevo entrenamiento para el mismo. Verdaderamente era el momento de volver con el autoentrenamiento, con lo que llevaba haciendo desde hace tantísimo tiempo. En el fondo no sabia hacer otra cosa, a Cesar la vida le había obligado a entrenar continuamente y ya de forma espontánea y natural se refugiaba en el entreno.

Llego a casa y después de preparase algo para reponer fuerzas, se sentó en el sofá con su libreta y su bolígrafo. Puso el jazz que tanto le gustaba oír de fondo y comenzó a escribir:

¿Qué sentido tiene lo que hago?¿Qué me aporta mi situación actual?¿Qué haría si no tuviera miedo?¿Cuál es mi propósito en la vida?¿Puedo convertir mi propósito en mi forma de vida?¿Realmente creo en mi?¿Estoy haciendo lo que me gusta?

¡El entreno había comenzado! Después de tantos años, Cesar empezaba desde cero el entrenamiento. El, que siempre había creído en el pensamiento positivo, volvía al entreno tal vez para reafirmarse en la idea de que entrenar no solo es bueno sino que también es necesario para no quedar estancado en la vida y atrapado en el tiempo.

Al venirle a la cabeza nuevamente los suyos, volvían a humedecerse sus ojos. Esta vez estaba claro que no era el mar. Era la duda que le asaltaba permanentemente, de si ellos habrían entrenado alguna vez desde cero, con esas preguntas que el estaba anotando ahora en la libreta.

Quería pensar que si, pero no lo sabia. Quería pensar que sabían que la consecución de sus metas se basaba un 15% en la formación que fuesen capaces de adquirir, en los amigos y los contactos, en el aprendizaje y que el restante 85% era cuestión de actitud, de compromiso, de disciplina.

El entrenador secaba sus lagrimas, mientras pensaba si los suyos serian conscientes de que el éxito es una secuencia de errores de los que vamos aprendiendo. Que si te equivocas poco aprendes poco y por ende alcanzar éxito se torna mas difícil.

Cesar sabe mejor que nadie que por mucho que asesore y entrene a un atleta, el nunca será el atleta y que los éxitos del atleta nunca serán del entrenador.

Conoce cual es la primera pregunta que hay que hacerse: ¿Qué quieres conseguir? A partir de ahí trazara un plan de acción y ayudara a los que entrena a no confundir lo sencillo con lo fácil y a entender que la mayor dificultad para conseguir los objetivos esta dentro de nosotros y no fuera.
Les entrenara en la búsqueda de soluciones, a centrase en ellas para conseguir los objetivos, a incrementar su nivel de conciencia y así facilitar el paso a la acción.


Por cierto, se me paso por alto preguntarte si tu, ¿...entrenas?. Espero que tu si te lo preguntes... y sobre todo que entrenes, nunca es tarde para empezar. El camino mas largo comienza con el primer paso...

4 comentarios:

  1. Parece que este año viene pisando fuerte queriamos que volviese, para terminar lo que nos dejo amedias y con ganas de ver como acababa, pero parece que se nos a cansado y nos viene filosofando o no se, a mi esto me pilla muy mayor y me cuesta entender, aunque acabo de hablar con el intelecto le pregunto si esta depre y me dice que no, aunque pienso que si pero bueno son puntos de vista distintos.
    Yo si que entreno casi todos los dias poco a poco y como el dice que va ha entrenar y que no esta depre haber si se viste y nos vamos a caminar los 6 Km que nos hacemos diarios y se le quite la tonteria, ¿ Y yo me hago una pregunta ¿Cuales son vuestros propositos? el mio mas cercano es que me toque la loteria y me voy a Berlin con el MANU. BSSSSSSSSSSSSSSSSSSS

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  2. Has estado mucho tiempo fuera, me encanta que estés aquí otra vez, y me gustaria muchisimo que entrenaramos juntos.Tienes razón en muchas cosas, yo entiendo perfectamente cuando Cesar se hace todas esas preguntas, escuchando el jazz que tanto le gusta, pero es tan dificil contestarlas...
    Sinembargo creo que tiene mucha razón al decir que la primera que hay que hacerse es ¿tu que quieres conseguir?, ahí está el quiz, porque el proposito que tú te marques es por el que lucharas y el éxito será conseguirlo, es decir lo que te hará pasar a la acción.
    La última reflexión me encanta, nunca es tarde para empezar, por muchas veces que caigas uno se levanta y a empezar de nuevo, creo que hemos sido una generacion, a pesar de todo, que no lo hemos pasado tan mal, me refiero comparada con otras, guerras, hambre etc., quizá nos vayan tocando ahora ciertas cosas, pero ¿sabes? el camino más largo comienza con el primer paso, NOS QUEDA TODO. Besos

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  3. pero esto que es???? necesitamos que vuelvas pero con energias no de esta manera yo lo que necesito es animacion que para reflexionar ya me paso las noches en vela y con esto no quiero decir que no este muy bien tu estilo al escribir y todas esas preguntas y reflexiones yo tambien quiero entrenar y sobre todo con la family de acompañantes pero enserio martin un poco mas de animos que creo nesecitamos todos arriba nosotros!!!y escuchemos jazz todos juntos que nos vendra de puta madre
    saludos y besos para todos

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  4. Estoy contigo ESTER, imaginate que esto yo lo tengo que aguantar a diario, espero que se le pase tanta intelectualidad no hay quien le aguante, prefiero los Leones, el azul, y el Juan XXIII. bs

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